Bailemos,
aunque sea a destiempo,
aunque luego el destino divida nuestros cuerpos bailemos,
que la música espera,
y el amor es una sonata de primavera cantada al viento.
Bailemos.
Sin miedo,
ahora que hay que tiempo
y como bailan los niños.
Con los sueños comprimidos dentro de una mirada
y las caricias frisadas en la punta de los dedos
quiero danzar en tu pecho
y abrazarme a tu cintura
que solo así comprendo esta locura
que es
la vida.
aunque sea a destiempo,
aunque luego el destino divida nuestros cuerpos bailemos,
que la música espera,
y el amor es una sonata de primavera cantada al viento.
Bailemos.
Sin miedo,
ahora que hay que tiempo
y como bailan los niños.
Con los sueños comprimidos dentro de una mirada
y las caricias frisadas en la punta de los dedos
quiero danzar en tu pecho
y abrazarme a tu cintura
que solo así comprendo esta locura
que es
la vida.